¿Tu papá y tú han discutido mucho últimamente? Esta puede ser una situación agotadora para cualquier niño, ya sea un adolescente en busca de independencia o un adulto frustrado. Las peleas pueden volverse tan serias que terminan alejando al padre y al hijo del placer de vivir juntos. Para terminar con estas peleas, aprenda a usar la buena comunicación, la responsabilidad y la diversión.
pasos
Método 1 de 3: Hablar y no pelear

Paso 1. Elija el mejor momento para hablar
Tal vez ustedes estén peleando mucho porque eligen los momentos equivocados para tener conversaciones serias. No le arrojes cosas difíciles a tu padre tan pronto como se canse del trabajo. Prefiere charlar después de la cena o el fin de semana.
Cuando se acerque a ti con ganas de hablar de algo importante y estés estresado, pregúntale si puede dejarlo para más tarde. Aprovecha los minutos que tendrás antes de la conversación para realizar una actividad relajante, como ducharte

Paso 2. Di lo que necesites
Al padre le gusta cuando los hijos muestran signos de madurez, como la confianza y la transparencia. Explícale directamente, desde el principio, lo que quieres de él.
- Diga, por ejemplo, “Papá, necesito hablar contigo sobre algo. Pero solo quiero que me escuches, no quiero consejos, solo quiero alguien con quien hablar ".
- Otro ejemplo: “Habrá una excursión escolar por la noche y me gustaría mucho ir. ¿Podemos hablar sobre esto?".

Paso 3. Descomplicar la conversación
Cuando necesites confesar algo que hiciste mal o que te tiene preocupado, acércate con mucha calma y humildad, brindando algunas posibles soluciones a la situación.
Por ejemplo, suponga que le han multado por exceso de velocidad. En este caso, un posible enfoque sería: “Papá, necesito decirte algo malo que hice hoy. Pero no te preocupes, todo está arreglado. Recibí una multa por exceso de velocidad camino al trabajo. Ya hablé con mi jefe y me dijo que puedo trabajar horas extras todo el mes para pagar la multa”

Paso 4. Pregunte qué puede mejorar
Dígale que se siente molesto cuando pelea con él. Admite tu papel en la pelea y di que quieres saber cómo mejorar. Podría ser que se ponga nervioso cuando llegue a casa después de un día estresante en el trabajo y te encuentre jugando videojuegos mientras el fregadero está lleno de platos sucios. Sin embargo, no se puede saber si lo que quiere es más ayuda en la casa o más respeto en general. Así que pregunte.
- Diga, por ejemplo: “Papá, últimamente hemos estado peleando mucho y eso me molesta mucho. Me gustaría saber si hay algo que pueda hacer para que no peleemos más o si hay algo que esperas de mí”.
- Dile también lo que esperas de él: “Papá, quiero tener una mejor relación contigo. A veces no me acerco porque sé que me vas a gritar. ¿Sería posible gritar menos?”.

Paso 5. Mantenga la calma
Puede pensar que su padre es muy injusto e incluso cruel. Sin embargo, recuerde que aunque no puede controlarlo, puede controlarse a sí mismo. Cuando grite, no le grites, no le des la espalda ni lo interrumpas. Si hiciste algo mal, discúlpate. De lo contrario, siéntese y escuche hasta que termine.
- Respire profundamente durante el proceso. Respire por la nariz y libérelo por la boca.
- No está mal mostrar tus emociones, pero no dejes que te afecten y te hagan decir palabras de las que te arrepentirás más tarde.

Paso 6. Respete su decisión
Cuando tu padre decida algo, respeta esa decisión. De esa manera, sabrá que puede confiar más en ti en el futuro. Intente negociar, pero acepte que la decisión final será suya.
- Por ejemplo, intercambie una hora extra el viernes por la noche a cambio de lavar su coche.
- Si tus padres te piden que realices alguna actividad ilegal o peligrosa, díselo inmediatamente a un adulto de confianza, como un maestro, ya que sabrán cómo ayudarte.

Paso 7. Comprender su forma de ver el mundo
La mayoría de las veces, el padre solo hace lo que cree que es mejor para sus hijos. Cuando no esté de acuerdo con una de las decisiones de su padre, póngase en su lugar. De esa manera, incluso si aún no está de acuerdo, comprenderá el motivo de la decisión.
Por ejemplo, si ha establecido un toque de queda a las 10:00 p. M., Mientras que sus amigos pueden quedarse hasta las 11:00 p. M., Comprenda que a su padre le preocupan las amenazas reales, como los conductores ebrios, las drogas y las malas compañías
Método 2 de 3: Cumplir con sus responsabilidades

Paso 1. Haga las tareas del hogar
Haz todo lo posible por evitar discusiones con tu padre. Hacer la tarea a tiempo es una de las mejores formas. Haga una lista de todo lo que necesita para cuidar y mantener su habitación ordenada. Completa todas las tareas de la lista antes de que tu papá llegue a casa.
Haz las tareas lo mejor que puedas para que tu padre no tenga que quejarse

Paso 2. Ayuda a tu padre antes de que te lo pida
Cuando lo vea luchando con algo, ayúdelo de inmediato; puede ser con la compra o la limpieza de las canaletas, por ejemplo. Ponte en su lugar e imagina cuántas responsabilidades y preocupaciones enfrenta a diario. Estas pequeñas ayudas pueden ayudar a aliviar un poco su sufrimiento y acercarlos aún más a los dos.

Paso 3. Haga su tarea
Si eres un adolescente o un preadolescente, haz tu tarea tan pronto como llegues de la escuela. Tu padre tiene muchas preocupaciones, así que trata de aliviar su estrés tanto como puedas. Si necesita su ayuda, pregunte solo después de la cena, cuando haya tenido más tiempo para relajarse.

Paso 4. Ayude a cuidar a sus hermanos
Si eres el hermano mayor, ayuda a cuidar a los menores. Ofrécete a cuidarlos para que tus padres puedan salir y divertirse por la noche. Cuando notes que los pequeños están pidiendo algo, llévaselo para que tu padre descanse un poco.

Paso 5. Llámalo más a menudo
Si vive lejos, tome la iniciativa de llamar, ya que su padre puede sentir nostalgia y no quiere ser el único que llame. Además de llamarlo, visítelo con más frecuencia para que pueda ver que es importante.
También es bueno crear un grupo de padres e hijos para que todos puedan comunicarse durante la semana

Paso 6. Honre su palabra
Cuando diga que hará algo, haga todo lo posible por mantener la promesa. Si los dos pueden confiar más en la palabra del otro, la relación comenzará a ser más positiva y dinámica.

Paso 7. Sea honesto
Cuando tu padre te haga una pregunta, responde siempre con sinceridad, incluso si es para confesar algo que hizo mal. Puede que no le guste la respuesta, pero admirará tu sinceridad y confiará más en ti.
Método 3 de 3: Diviértete con tu papá

Paso 1. Demuestre que lo admira
Después de eliminar las disputas, comience a hacer un esfuerzo por decir lo agradecido que está por todo lo que ha hecho su padre. Cuando se sienta valorado, tenderá a no pelear más contigo.
- Di algo como esto: “Papá, gracias por estar siempre ahí cuando te necesito. Muchas gracias por asistir a mi presentación en la escuela. Fue muy importante para mí”.
- Dígalo en persona o escriba una nota.

Paso 2. Cenar en familia
En lugar de esperar a que tus padres hagan una cita para que todos se sienten juntos, hazlo por ellos. Sugiera que se reúnan dos veces por semana para cenar juntos en familia. Hable sobre cómo pasó el día y apague sus teléfonos durante el período de la cena.
Incluso puedes jugar a un juego, como la mímica o jugar a las cartas, por ejemplo

Paso 3. Caminen juntos por la noche
Invita a tu papá a dar un paseo por el vecindario después de la cena. De esa manera, tendrán tiempo de calidad juntos y una buena oportunidad para hablar. Camine hasta la plaza o busque otro lugar donde pueda sentarse y hablar.

Paso 4. Hagan algo que les guste juntos
Puede parecer que los dos no tienen nada en común, pero lo cierto es que debe haber algo que les guste a ambos. Pueden disfrutar viendo documentales en la televisión, jugando videojuegos o cocinando. Sea lo que sea, lo importante es que pasen más tiempo juntos.