El limón es una fruta cítrica versátil que se puede utilizar tanto en platos dulces como salados, ya sea como guarnición o como ingrediente principal. Sin embargo, al igual que otras frutas frescas, no dura mucho, especialmente cuando ya está cortada. Pero siempre hay una forma. Aprenda a continuación cómo congelar limones para que duren más.
pasos
Método 1 de 5: congelar limones enteros
Paso 1. Coloque los limones en un paquete con cierre hermético
Cierre la bolsa presionándola para eliminar todo el exceso de aire de la bolsa. Luego ciérralo. Aspirar el recipiente mantiene la fruta fresca y ocupa menos espacio en el congelador.
Paso 2. Guarde la bolsa de limones en el congelador y espere a que se enfríe
Dependiendo de la temperatura del congelador, deje el recipiente durante dos horas durante la noche. Use limones frescos para sus comidas durante la semana y deje los resfriados para más tarde.
Paso 3. Deje los limones en agua fría durante diez minutos para descongelarlos
Cuando las frutas refrigeradas se descongelan, a menudo son difíciles de cortar porque están más marchitas. Entonces, use el limón para hacer un jugo o use la ralladura de la fruta como guarnición en un plato.
Los limones duran hasta tres o cuatro meses en el congelador
Método 2 de 5: congelar el limón en rodajas
Paso 1. Corta el limón en rodajas o trozos
De esta forma es posible conservar la fruta para su uso en cócteles y decoración en las comidas. Cortar el limón en rodajas de unos 6 mm o en cuatro trozos.
También puede cortar las rodajas por la mitad para crear rodajas de limón en forma de media luna
Paso 2. Coloque las rodajas de limón espaciadas uniformemente en una bandeja para hornear y congele
Si omite este paso, las rodajas o piezas se congelarán y formarán un "bloque". Deje los limones en el congelador durante dos o tres horas o hasta que estén completamente fríos.
Estarán completamente congelados cuando estén duros y la pulpa no "suelte" el jugo cuando aprietes
Paso 3. Coloque las rodajas o piezas en un paquete con cierre hermético
Este empaque le permite tomar solo lo que se necesita para la receta en ese momento y volver a sellar la bolsa de plástico, ocupando también menos espacio en el congelador que la bandeja para hornear.
Método 3 de 5: congelar la ralladura de limón
Paso 1. Use un rallador o un pelador para hacer la ralladura de limón
La cáscara de limón es rica en aceites naturales, lo que la hace ideal para cocinar. Empiece pelando la fruta.
También puede hacer ralladura de limones previamente congelados
Paso 2. Coloque las patatas fritas en una bolsa con cierre hermético y congélelas
Puede usar el resto de los limones en recetas durante la semana, o también puede cortarlos y enfriarlos.
Paso 3. Deje la ralladura en el congelador durante dos horas o toda la noche hasta que esté completamente congelada
Use la cantidad necesaria para la receta del día y siga guardando lo que queda.
Pelar o raspar los limones después de congelarlos evitará que los aceites de la cáscara salpiquen sobre la tabla de cortar o sobre usted
Método 4 de 5: Congelar jugo de limón
Paso 1. Congele el jugo
Exprime los limones con un exprimidor o con tus propias manos. Extrae la mayor cantidad posible de pulpa de fruta.
Paso 2. Mida una taza (aproximadamente 240 ml) de jugo de limón
Las mediciones más precisas serán más útiles cuando se utilicen en recetas. Retire las semillas que se puedan mezclar con el jugo.
Paso 3. Vierta jugo de limón en bandejas para cubitos de hielo
Cuente cuántos cubitos de hielo “dan” la medida de una taza llena. Esto le permitirá realizar mediciones más precisas cuando lo use en recetas.
Estos cubos de jugo de limón pueden volverse acuosos
Paso 4. Coloque en el congelador y espere a que el jugo se enfríe por completo
Una vez exprimido, el jugo de limón dura un máximo de cuatro días si no se congela; de ahí la practicidad de los cubos de jugo.
Si necesita usar los vasos de hielo, transfiera los cubos de jugo de limón a un recipiente con cierre hermético
Método 5 de 5: preparación de limones para el almacenamiento
Paso 1. Lávese las manos con agua y jabón antes de manipular alimentos
La falta de higiene provoca que las toxinas y bacterias de la piel se transfieran a la cáscara de la fruta. También puede usar guantes si lo prefiere.
Paso 2. Frote los limones con una esponja
Utilice solo una esponja para limpiar los alimentos, ya que acumulará las toxinas químicas de la cáscara de la fruta.
Paso 3. Lave los limones
Enjuáguelos con agua fría antes de congelarlos para quitarles los pesticidas. También puede utilizar un producto para desinfectar verduras y frutas. Luego séquelos con una toalla de papel o un paño de cocina.
Paso 4. Utilice una solución de vinagre para eliminar los pesticidas de la cáscara de los limones u otras frutas
Elimine los productos químicos remojando los limones en una solución de vinagre al 10% y agua al 90% durante 15 a 20 minutos. Luego lávelos con agua fría y séquelos con un paño.