A todo el mundo le encanta un buen trozo de costilla, pero la membrana gruesa que se encuentra detrás puede hacer que la mordedura sea dura. Quitar la "piel blanca" antes de cocinar le permite condimentar la carne en lugar de la membrana y ayuda a que la costilla esté aún más tierna y jugosa. Si encuentras y sueltas la membrana, puedes quitarla de la costilla, dejando la pieza lista para hacer tu receta favorita.
pasos
Método 1 de 2: Encontrar y aflojar la membrana
Paso 1. Saque la costilla del envoltorio
Saque la costilla del envoltorio y séquela con una toalla de papel. Deseche el papel usado en la basura.
Resista la tentación de lavar la carne, ya que esto puede causar contaminación cruzada en su cocina y evitar que se dore
Paso 2. Gire la costilla para que los huesos queden arriba
Coloque la costilla sobre una superficie limpia, como una tabla de cortar o una bandeja para hornear. Colóquelo de manera que el lado cóncavo esté hacia arriba y el otro hacia abajo sobre la tabla o bandeja para hornear.
Sabrá que está orientado hacia el lado correcto cuando la membrana blanca esté frente a usted
Paso 3. Utilice un cuchillo afilado para pasar por debajo de la membrana
Localice una costilla en el medio de la pieza tanteando con los dedos hasta que encuentre un hueso firme. En la base de esta costilla, en el lado más cercano a usted, sostenga el cuchillo de muesca horizontalmente y presione la punta afilada entre la costilla y la membrana que la cubre.
- Presione el cuchillo entre la nervadura y la cinta hasta que toda la hoja quede debajo de la cinta.
- Tenga cuidado de no presionar el borde afilado del cuchillo a través de la membrana.
Paso 4. Levante la membrana con la parte de la hoja inalámbrica del cuchillo
Gire el cuchillo verticalmente para que el lado romo del cuchillo levante ligeramente la membrana. El lado afilado estará contra la costilla. Al hacer esto, debe abrirse un espacio de aire entre el hueso y la membrana.
Si no tiene mucha habilidad con los cuchillos, coloque un pasador de mantequilla inalámbrico en el espacio creado por el cuchillo afilado para aflojar la membrana. Esto reduce las posibilidades de que se corte la piel blanca
Paso 5. Incline el cuchillo hacia arriba en un ángulo de 30 grados
Presione el lado afilado del cuchillo contra el hueso de la costilla y levántelo con el mango del cuchillo. Mantenga el lado afilado del cuchillo en contacto con la costilla. Este movimiento ayudará a levantar aún más la membrana.
Saca el cuchillo de la costilla y déjalo a un lado
Método 2 de 2: tirar de la membrana de la costilla
Paso 1. Coloque un dedo en el espacio entre el hueso y la membrana
Coloque su dedo índice en el espacio que abrió el cuchillo debajo de la membrana. Mueva su dedo de lado a lado para separar aún más la membrana y aumentar el espacio.
Intente levantar la membrana con el dedo lo suficiente para formar una solapa de tela que pueda agarrar
Paso 2. Use una hoja de toallas de papel para levantar la membrana
Coloque una hoja limpia de toalla de papel sobre la palma de su mano dominante de modo que cubra su dedo índice y pulgar. Tome el papel en su mano y utilícelo para atrapar el borde suelto de la membrana entre sus dedos.
El papel dará un mejor agarre para sujetar la membrana, que es fuerte y resbaladiza
Paso 3. Pase los dedos por debajo de la cinta hasta llegar al otro lado de la costilla
Sostenga la costilla con su mano no dominante y tire del borde de la membrana usando el papel con su mano dominante. A medida que te levantas, presiona los dedos de tu mano no dominante contra el otro lado de la costilla.
- Los dedos saldrán por el otro lado, creando un arco de membrana.
- Si la membrana comienza a rasgarse al levantarla, use el cuchillo para separar la nervadura de la membrana en el otro lado para encontrar el lado que está moviendo.
Paso 4. Tire de la membrana hacia arriba alejándola de la nervadura
Coloque dos dedos de su mano dominante en la "pestaña" que hizo, a través del espacio entre la costilla y la cinta. Presione hacia abajo la costilla con la otra mano y tire de la membrana hacia arriba alejándola de la carne. Debería salir de una pieza.
- Si su costilla es muy larga, reajuste el tamaño del borde de la cinta que aflojará según sea necesario, acercándose al borde de la nervadura para levantar la cinta de una vez.
- Si se desliza la mano al tirar de la membrana, tome una hoja de papel toalla y tire de ella para un mejor agarre.
Paso 5. Deseche la membrana
Tire la piel gruesa y blanca de la membrana que sale de la costilla a la basura. Ahora tu pieza de costilla está limpia y lista para ser sazonada y preparada como prefieras.
Consejos
- Haz la costilla en la barbacoa para darle un sabor ahumado y delicioso.
- Asar la costilla en el horno es una excelente manera de hacerla jugosa si el clima no es el adecuado para una barbacoa.
- Si le gustan los métodos que requieren poco trabajo, intente usar una olla de cocción lenta para dejar que la carne se desprenda del hueso, es tan suave.