Si bien existe el sentido común de que los perros y los gatos se odian entre sí, estos animales pueden vivir en armonía e incluso ser amigos. El proceso lleva mucho tiempo y requiere paciencia, especialmente cuando son mayores y no se conocen. Sin embargo, ¡es muy posible enseñarle a un perro a dejar de perseguir gatos!
La veterinaria Pippa Elliott recomienda:
"Planifica todo el proceso y haz un buen entrenamiento de obediencia con el perro de antemano. Tu mascota necesita respetar órdenes básicas como" Siéntate "antes de aprender a controlar sus propios instintos para perseguir gatos".
pasos
Método 1 de 5: Presentar perros y gatos entre sí
Paso 1. Elija un lugar adecuado
Presente al perro y al gato en casa, no en el refugio donde adoptó a uno de ellos. Esta experiencia puede ser bastante traumática, especialmente para el gatito. No arriesgue la seguridad de ninguna de las mascotas.
Paso 2. Elija un nuevo animal que coincida con el que ya tiene
Si siempre ha preferido perros pero ahora quiere adoptar un gato (o viceversa), es probable que uno persiga e incluso ataque al otro. En ese caso, pregunte al personal del refugio o de la tienda de mascotas si el animal que piensa llevarse a casa se lleva bien con otros tipos de animales. El período de ajuste puede ser más corto o más largo dependiendo de estas condiciones.
Paso 3. Ponga a los animales a interactuar en situaciones tranquilas
Por difícil que sea presentar al perro y al gato sin ningún problema, es importante intentar por el bienestar de los animales. Solo necesitas recurrir a algunas técnicas básicas en este proceso, que involucran ciertos comandos y recompensas.
- Dele al perro y al gato las golosinas que les gusten, pero recuerde que los coños son un poco más exigentes en este sentido y les gustan los trozos de atún o pollo.
- Entrene al perro (o refuerce el entrenamiento existente) en situaciones básicas, como quedarse quieto, acercarse a usted y alejarse de usted cuando sea necesario. Haga esto antes de llevar al gato a casa (o al perro, en el caso opuesto), o será mucho más difícil lograr que los dos animales tengan interacciones positivas.
- Lleve al perro a pasear o déjelo salir al patio trasero antes de presentar al gato. De esa manera, gastará el exceso de energía que tiene y no estará dispuesto a meterse en problemas con el nuevo animal.
Paso 4. Presenta a los dos animales
Quédese en todo momento. Mantenga al perro atado, pero use golosinas si no parece que esté funcionando (para él y el gato). También es bueno pedir ayuda a otra persona; así, cada uno puede ser responsable de un animal.
Deje que los animales se olfateen entre sí. No sirve de nada sostener a cada uno en el extremo opuesto del espacio: júntelos, pero esté listo para intervenir si es necesario
Paso 5. Elogie y recompense a ambos animales
Habla con los dos animales con voz dulce, dales golosinas y acarícialos si se portan bien.
Continúe alabando y recompensando a los animales en las semanas posteriores al entrenamiento
Método 2 de 5: enseñar al perro a dejar solo al gato
Paso 1. Ponga una golosina en cada mano
Deje que el perro huela solo uno de ellos. Probablemente se emocionará cuando piense que está siendo recompensado, pero ignore sus intentos de obtener la golosina de inmediato.
Paso 2. Diga "Salir"
La parte más importante de este ejercicio es ignorar al perro hasta que deje de intentar conseguir la golosina. Sigue diciendo "Vete" hasta que obedezca. Esto puede llevar un tiempo, pero eventualmente funcionará.
Paso 3. Elogie y recompense al perro
Di "buen chico" y dale la golosina de tu otra mano cuando él obedezca. ¡No entregues lo que está en la mano a lo que estaba prestando atención! De lo contrario, acabará entendiendo que solo tiene que insistir para conseguir lo que quiere.
Paso 4. Repita el proceso
Sea constante en el entrenamiento y repita el proceso hasta que el perro se aleje inmediatamente de su mano cuando le dé la orden.
Paso 5. Empiece a decir "Vete" cerca del gato
Puede comenzar a usar el comando "Salir" cerca del gato cuando el perro comience a respetar su orden. Siga teniendo cuidado con los dos animales juntos, ya que el comportamiento del perro puede cambiar un poco en presencia de lo que ve como una presa. Ten paciencia y avanza en el entrenamiento hasta que todo salga bien.
Método 3 de 5: usar un clicker con el perro
Paso 1. Compre un clicker
El clicker es una especie de caja de plástico con un botón de metal que ayuda a entrenar y controlar el comportamiento de los perros. El entrenador sostiene el clicker en la palma de su mano y presiona el botón varias veces seguidas cuando quiere condicionar algún comportamiento en el animal.
Compre el clicker en cualquier tienda de mascotas o en línea
Paso 2. Acostumbra al perro al clicker
Simplemente presione el botón de clic inmediatamente después de que su cachorro haga lo que usted espera que haga. De lo contrario, el animal asociará ese buen comportamiento (en este caso, no perseguir al gato) solo con el sonido del propio clicker.
Paso 3. Dele una golosina al perro de inmediato
El último componente del entrenamiento con clicker es darle una golosina al perro justo después de presionar el botón. Es necesario ser ágil, ya que el animal debe asociar el buen comportamiento con el sonido del clicker y, posteriormente, el sonido con la golosina.
Paso 4. Simule los movimientos del gato
Puede incorporar elementos más complejos en el adiestramiento de perros con el clicker, como simular los movimientos del gato. De esta forma, el animal podrá adaptarse mejor a situaciones reales que puedan surgir en interacciones reales con el gatito.
- Empiece a caminar hacia atrás muy rápidamente mientras el perro le está prestando atención.
- Deténgase de repente. Usa el clicker y recompensa al perro si también se detiene en lugar de perseguirte.
Paso 5. Celebre el progreso del perro
El perro no cambiará el 100% de su comportamiento de la noche a la mañana, pero comenzará a comprender sus órdenes con el tiempo (en este caso, no perseguirá a su gato). Recompense incluso las pequeñas mejoras, ya que indican que el animal está dejando atrás ciertos instintos. Active el clicker y recompénselo siempre que esto suceda, y gradualmente el hábito se desvanecerá de una vez por todas.
Método 4 de 5: evitar que el perro persiga a otros gatos en la calle
Paso 1. Simplemente lleve al perro a pasear con una correa
Si tu perro tiene tendencia a perseguir gatos en la calle, es mejor que siempre le pongas una correa cuando salgas a caminar. Suéltelo solo si no hay un gatito alrededor, como en plazas y otros lugares tranquilos. De todos modos, será mejor que te acostumbres a los "tiempos" en los que no hay otros animales alrededor. Tenga en cuenta que los gatos son más activos a primera hora de la mañana y especialmente a primera hora de la noche cuando salen a cazar.
- Utilice el método de comando "Salir" cuando pasee al perro. Puede suceder que intente perseguir gatos en la calle a pesar de que está con una correa. Enséñele a estar callado cuando vea estos animales, especialmente si hay muchos cerca de su casa.
- Tenga cuidado, ya que el perro puede comenzar a tensarse contra el collar y a ladrar cuando vea gatos en la calle. Dependiendo del caso, notará que estás nervioso por lo que está pasando y se pondrá aún más agresivo. Aprenda a mantener su atención en cualquier situación para evitar que esto suceda. Dar bocadillos, elogios, etc. y comience en un entorno tranquilo, como dentro de su casa, antes de salir a caminar. Verás que está mucho más tranquilo.
- Otra técnica interesante es enseñarle al perro a que se acerque a ti cuando lo llames antes de que empieces a pasearlo sin correa. Haga esto mientras se aleja del animal (como antes), y el ejercicio tendrá aún más efecto. Con el tiempo, asociará el buen comportamiento con las recompensas que puede recibir. ¡Recuerde siempre tener buenos bocadillos a mano!
Paso 2. Suelta al perro en el patio trasero
Puedes soltar al perro en tu patio trasero, siempre y cuando tengas cuidado al abrir el portón (para entrar, salir o aparcar el coche, por ejemplo). De esa manera, tendrá un poco más de libertad sin el riesgo de perseguir gatos por la calle y causar problemas.
Paso 3. No permita que ningún gato entre en su jardín
Pídale a sus vecinos que tengan cuidado con sus gatos domésticos si tiene miedo de que algo pueda pasar. Si es necesario, instale rociadores de agua con detección de movimiento y use otras estrategias para mantener alejados a los animales. Finalmente, no olvide que no siempre vale la pena hablar con los dueños de mascotas (ya que los gatos son animales muy asustadizos).
Método 5 de 5: Entender cuándo es el momento de intervenir
Paso 1. Comprenda por qué los perros persiguen a los gatos
Los perros persiguen a los gatos por dos razones principales: cuando quieren jugar (quizás pensando que los gatos son en realidad otros perros) o cuando tienen activado el instinto depredador. Tienes que intervenir si algo así le sucede a tu mascota. Es posible que tu mascota incluso quiera jugar, pero terminará siendo demasiado agresiva e incluso lastimando el coño en el proceso. Intervenir es aún más importante si está cazando, ya que existe el riesgo de que el animal incluso mate al otro "sin querer".
Paso 2. Vigile a los animales en todo momento
El período de entrenamiento y adaptación tomará un tiempo. Podrás alejarte del perro y el gato después de un tiempo, pero es mejor no arriesgar su seguridad durante al menos un mes antes. Lo más importante es asegurarse de que no atraquen cuando estén solos.
Paso 3. Castigue al perro cuando comience a perseguir al gato
Suena tonto, pero ayuda mucho a corregir el mal comportamiento del animal que está en entrenamiento. Simplemente no piense en nada que pueda poner en riesgo la seguridad de su mascota. Solo sácalo de la situación por un tiempo.
- Coloque al perro en el mismo espacio siempre que esté conectado a tierra. Piense en un entorno aislado, como el baño trasero de su casa. Simplemente no lo hagas sentir incómodo, como bajo la lluvia o el sol abrasador o en situaciones peligrosas y dañinas.
- Diga "Castigo" lentamente cuando su perro comience a perseguir al gato.
- Lleve al perro por la correa al lugar de castigo lentamente cuando comience a perseguir al gato.
- Espere uno o dos minutos y luego suelte al perro. Repite el proceso si vuelve a perseguir al gato.
Paso 4. Desvíe la atención del perro
Puedes condicionar el interés de tu perro si ninguna otra técnica funciona. Esta medida debe ser un último recurso y nunca poner en riesgo la seguridad del animal. Los expertos recomiendan que los dueños de mascotas asocien la experiencia con algo desagradable, que involucre cosas como sonidos y olores específicos. Incluso el uso de un spray de agua fría puede detener al perro. Con el tiempo, asociará el comportamiento con este "castigo" y dejará de hacerlo gradualmente.
Paso 5. Contrata a un entrenador o entrenador profesional
Es posible que tengas que acudir a un profesional si todo lo demás le va bien al perro. Busque a alguien que sea un experto en el tema y use métodos probados y confiables con animales. Si bien el proceso no es tan barato, es mucho más efectivo que intentar hacerlo todo usted mismo, especialmente cuando nada más funciona para evitar que el perro persiga gatos.
Haga una búsqueda en Internet o pídale a un veterinario u otra persona de confianza que le brinde orientación de entrenadores y capacitadores. Si es posible, también hable con los clientes satisfechos de este profesional antes de cerrar el trato
Consejos
- No permita que el perro tenga acceso al comedero ni a la caja de arena del gato. Esto puede hacer que el coño esté estresado e incluso agresivo.
- No es necesario que levante la voz o grite para darle órdenes al perro.
- Sea consistente en el entrenamiento. Las mejores estrategias son repetir y recompensar ciertos comportamientos.
Avisos
- Nunca seas violento con ningún animal. Esto no solo es cruel, sino que puede provocar problemas de comportamiento (como agresión y miedo excesivo).
- No use collares de cadena. Elija materiales más suaves como cuero y plástico que no duelan.
- Algunos perros nunca aprenden a no perseguir gatos, incluso cuando son inteligentes. Esto puede suceder si los instintos de caza de su mascota son demasiado fuertes. Si es así, concéntrese en enseñarle al animal el comando "Salir". Haga varios ejercicios con él a diario y simplemente llévelo a caminar con una correa.